Los empresarios alertan: la incertidumbre política es la principal amenaza para la economía
La crisis energética, la escalada de la inflación y los tipos de interés al alza dibujan un escenario complejo para el tejido empresarial español. Las compañías se muestran cautas, pero optimistas sobre su crecimiento en los próximos doce meses. Así se desprende del informe ‘Perspectivas España 2023’, realizado por KPMG en colaboración con CEOE, en el que casi la mitad de los empresarios (46%) considera que la incertidumbre política es una de las principales amenazas para la economía española en 2023 y un 36% sitúa los cambios regulatorios entre los riesgos para su negocio.
El estudio también pone de manifiesto que el 70% de los empresarios que han participado en el sondeo espera que sus ventas aumenten a lo largo del año (siete puntos menos que en 2022) y que un 50% invertirá más (diez puntos menos que en la pasada edición).
Sobre la situación de la economía española, un 57% de los directivos la califica como regular (53% en 2022), mientras que un 28% considera que es mala o muy mala. Estos datos contrastan con la opinión que comparten sobre la situación actual de sus empresas: casi tres de cada cuatro (73%) considera que es buena o excelente. Además, un 44% de los empresarios encuestados confía en que la situación de su organización mejore a lo largo del año.
En cuanto a las previsiones de contratación, los empresarios se muestran más prudentes. No obstante, los resultados ponen de manifiesto el compromiso de las empresas con el empleo: con respecto a 2022, disminuye el porcentaje de encuestados que ampliará su plantilla al 38% (ocho puntos inferior a 2022) y aumenta al 50% el de aquellos que la mantendrán igual (siete puntos más que en la edición anterior).
Antonio Garamendi, presidente de CEOE, ha afirmado que «las conclusiones del informe reafirman la necesidad de impulsar medidas de apoyo efectivas a las empresas para mantener la marcha de la economía y el empleo, así como de contar con un marco de estabilidad política y calidad normativa que genere un clima de inversión favorable».
Por su parte, Juanjo Cano, presidente de KPMG en España, considera que «dentro de la prudencia que exige el contexto actual, las expectativas de los empresarios españoles sobre la evolución de sus organizaciones son optimistas y muestran su confianza en el incremento de las ventas, el impulso de la inversión y en el mantenimiento del empleo. Este optimismo se asienta en una apuesta decidida por continuar avanzando en la transformación digital y sostenible».
Inflación
El informe también revela los efectos de la inflación en otros ámbitos de la gestión corporativa. Un 69% de los directivos asegura que la inflación ha tenido un impacto alto o muy alto en los márgenes de beneficio de su organización. Como consecuencia, más de la mitad de los encuestados (52%) ha redefinido sus políticas de precios para reflejar el aumento de los costes y un 31% prevé hacerlo en los próximos doce meses. Además, un 45% ha renegociado sus contratos con proveedores y un 32% tiene previsto hacerlo a lo largo de este año.
En este sentido, no resulta sorprendente que la mayoría de los encuestados (53%) sitúe el desarrollo de medidas para mitigar inflación entre sus prioridades estratégicas para los próximos doce meses y un 54% considere que el alza de precios es una de las principales amenazas para la economía española a corto plazo.
Así, tres aspectos estrechamente relacionados con la inflación como son el coste de la energía, la volatilidad de los precios o el riesgo de demanda registran un mayor porcentaje de respuestas cuando se les pregunta a los directivos por los principales riesgos para su negocio en este ejercicio.